Operación de la Guardia Civil en el puerto de Ceuta: al menos 40 inmigrantes ilegales detenidos tras una batalla campal

Operación de la Guardia Civil en el puerto: al menos 40 detenidos tras una batalla campal

Piedras, enfrentamientos entre marroquíes de la zona norte y sur por el control del territorio para colarse en los barcos, de trasfondo



por Carmen Echarri - 17/06/2019  

La Guardia Civil ha tenido que desplegar esta madrugada a los GRS tras producirse una auténtica batalla campal entre los dos sectores de marroquíes, adultos y menores, que llevan enfrentándose por el control del terreno portuario en Ceuta desde hace varios días. Los altercados, que se han saldado con 36 personas interceptadas y 4 detenidas, comenzaron pasadas las dos de la madrugada.

Los trabajadores que se encontraban en las empresas situadas en la zona restringida del puerto tuvieron que salir corriendo al verse sorprendidos por la llegada de unas 70 personas, marroquíes que habitualmente viven en la explanada y que proceden de zonas del norte. Entraron a la carrera, sorprendiendo al único policía portuario que estaba en el control y que dio la voz de alarma.

En las escolleras esperaban los marroquíes integrantes del segundo grupo: los procedentes de zonas del sur y a los que se les acusa de agresiones y robos. Ellos controlan la zona restringida, han ocupado las escolleras convirtiéndolas en su vivienda particular y evitan la entrada de otros inmigrantes para ser los primeros en colarse en las bateas y acceder a los barcos.

Piedras lanzadas con hondas y daños materiales

A pedradas, lanzadas incluso con hondas, se han enfrentado mientras los trabajadores portuarios escapaban del lugar al ver peligrar su integridad física. Sobre el terreno quedaban vehículos destrozados. La Policía Portuaria y los escasos agentes de la Guardia Civil que había cerraron el acceso de vehículos de empresas y de camiones por su propia seguridad.

Gritos, piedras, insultos, amenazas… la situación vivida ha sido indignante. Los GRS fueron activados y se desplegaron en el lugar para empezar a la práctica de las detenciones. Sobre el terreno llegaban mandos del Instituto Armado para coordinar el operativo, de evidente riesgo.

De entre los 40 inmigrantes hay dos a los que se vincula con el incendio provocado en un contenedor de Ecoceuta. Un agente portuario intentó apagar las llamas hasta la llegada de los Bomberos que ya erradicaron cualquier peligro. Dos de los detenidos fueron plenamente identificados como artífices de esta quema, además de otras 2 personas que han sido detenidas también por su relación con el lanzamiento de piedras a agentes de la autoridad.

Y así durante toda la madrugada se ha procedido a una batida extraordinaria para detener y trasladar de todos los puntos a los inmigrantes que iban siendo interceptados. Del exterior, bien huyendo por la explanada o desde dentro de las escolleras. Se requirió apoyo del Servicio Marítimo y de los GEAS por si alguno caía al agua además de contarse con el helicóptero, clave para sondear desde el aire qué personal estaba escondido en las cuevas.

El despliegue, del que ha sido testigo FAROTV durante toda la noche, ha durado hasta pasadas las cinco de la madrugada, con la retirada de los GRS pero quedando permanente patrullas de la Compañía de Ceuta para revisar la zona con mayor detenimiento. Todos los interceptados serán entregados de manera gradual a la Policía Nacional, para que en aplicación de la Ley de Extranjería se proceda a su expulsión, salvo los casos de detenidos por comisión de delitos que serán puestos a disposición judicial.

Las víctimas de esta situación: “No podemos más”

Y mientras la Guardia Civil con Policía Portuaria trabajaba sobre el terreno, hacía acto de presencia también alguna unidad de la Policía Nacional por si se necesitaba su apoyo. Las víctimas de toda esta situación quedaban en la zona de Poniente: son los trabajadores de las empresas, los transportistas, los empleados de seguridad y operarios de empresas como Atlas o Ecoceuta. Ellos son los que están a pie de terreno, los que reciben las amenazas, las agresiones, el lanzamiento de piedras, las malas miradas. Y ya no pueden más.

Llevan sufriendo tres días consecutivos la inseguridad y el riesgo debido a ese enfrentamiento entre el norte y el sur por el control del puerto. Algo inimaginable que pueda estar ocurriendo. Todos se preguntan cómo puede haber un asentamiento en zona restringida de personas que no pueden pernoctar en Ceuta y que terminan generando este tipo de enfrentamientos, además de ser causantes de las agresiones entre ellos y las que se producen contra bienes de estos trabajadores.

El sábado un trabajador de Ecoceuta terminó con la mano destrozada, después de parar una piedra cuando ya le habían pegado en la espalda. Está de baja, ha recibido 8 puntos de sutura en la mano y se encuentra a la espera de su evolución. Pero a él se suman los coches rotos de trabajadores, las amenazas y el miedo constante a permanecer en el puesto de trabajo cuando este queda alterado por situaciones como la vivida esta noche.

Las detenciones aleatorias son pan para hoy y hambre para mañana, puesto que el filtro en la frontera del Tarajal, que separa Ceuta de Marruecos, deja mucho que desear en cuanto a ser garantía de una impermeabilización que termine con estos hechos. Todos se hacen la misma pregunta: ¿cuánto tardarán en volver? Y mientras tanto los camioneros están parados durante horas sin poder descargar, los trabajadores sin poder realizar sus labores y se suceden unas consecuencias negativas para el tráfico portuario, con barcos que ya anuncian que no quieren atracar en el puerto de Ceuta para su avituallamiento o los que se encuentran con inmigrantes que intentan colarse o lo consiguen, lo que les obliga a tener que regresar a puerto. De hecho esta madrugada, entre batalla campal y detenciones, algunos lograron colarse en uno de los barcos.

Fuente:https://elfarodeceuta.es/guardia-civil-puerto-detenidos-batalla-campal/

¡A la calle! Los marroquíes que protagonizaron una batalla campal en Ceuta son expulsados de España.

diariopatriota.com
18.06.2019

La mayoría de ellos han sido expulsados del país.

La Guardia Civil detenía esta semana a 40 jóvenes marroquíes, varios de ellos menores de edad, después de que protagonizaran una auténtica batalla campal en los alrededores del puerto de Ceuta.

Fue esta semana cuando el único vigilante que se encontraba en la zona donde ocurrió la batalla campal avisó inmediatamente a la Guardia Civil para informar de que seseta jóvenes asaltaban el puerto mediante el uso de la fuerza.

Ante la violencia de los inmigrantes, la Guardia Civil se vio obligada a enviar varios agentes de los Grupos de Reserva y Seguridad para tratar de calmar la situación, algo que no lograron ya que los marroquíes quemaron contenedores y provocaron numerosos daños en el mobiliario público.

Ante estos hechos de extrema gravedad, fuentes de la Delegación del Gobierno han confirmado que la gran mayoría de ellos han sido expulsados de España de manera inmediata de acuerdo a la Ley de Extranjería. Antes de proceder a la expulsión, fueron llevados a dependencias de la Policía Nacional, donde se les prestó declaración.

Desde el Gobierno también han confirmado que no todos los inmigrantes han podido ser devueltos, puesto que los menores de edad han tenido que ser trasladados al centro de acogida La Esperanza. Las autoridades ya han comenzado a investigar si realmente tienen menos de 18 años.

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Más vale tarde que nunca.

UGT exige seguridad para los trabajadores del puerto y Cepsa deja de suministrar combustible a los barcos.

elfarodeceuta.es
Carmen Echarri.  
18.06.2019

El sindicato advierte de que el Puerto se va a ir ahogando poco a poco y exige a la Delegación que actúe.

La cadena de reacciones ante lo ocurrido en el puerto, con la batalla campal entre inmigrantes que llevó a intervenir a las fuerzas de seguridad, no ha hecho más que comenzar. Ahora es UGT, a través de su Federación de Transportes, la que exige seguridad para todos los trabajadores, recordando que hay empresas que se van a negar a operar por el nivel de inseguridad reinante. La primera Cepsa, que ha anunciado al sindicato que deja de suministrar combustible en Poniente mientras sus trabajadores no tengan unas condiciones mínimas de seguridad.

El sindicato alude a las “altas dosis de inseguridad”, con “grandes tumultos de personas que campan a sus anchas por zonas donde pasan tuberías cargadas con combustibles inflamables y por donde se hacen operaciones con mercancías peligrosas”, advierte. UGT dice que estas operaciones pueden verse “comprometidas” por esos asentamientos y abordajes, recordando que incluso se hacen fuego a la vista de toda la comunidad portuaria que “vive con asombro esta situación”.

Los trabajadores afectados son muchos: transportistas, amarradores, consignatarios, concesionarios, suministradores de combustible… quienes “no deben ir al trabajo con temor a ser agredidos, ni trabajar en un contexto que parece más bien una zona de conflicto de cualquier país tercermundista que un puerto comercial, como consecuencia de todo lo que lleva ocurriendo en los últimos meses”.

Y es que pasar ha pasado ya demasiado: trabajadores con puntos de sutura al recibir pedradas, apedreamientos a vehículos, menores fallecidos, batallas campales…. “En el puerto confluyen muchas administraciones, cada una competente en las materias que le asigna el ordenamiento jurídico. La Administración General del Estado tiene competencia en orden público y extranjería, no puede dejar la Delegación en manos del Puerto la resolución de sus propias competencias porque esta no tiene recursos”.

Exige aumento de las fuerzas de seguridad ya que las batidas puntuales “no son suficientes”, reclamando a Delegación que sea consecuente con la ciudad dotando unidades permanentes para prevenir estos conflictos. “Unos pocos guardias civiles y policías portuarios no pueden contener la necesidad de centenares de personas, esto es un problema nacional y, por ende, del Estado”.

UGT advierte de que el puerto se ahoga y pone de ejemplo la decisión de Cepsa y advierte de que las escalas irán bajando por la inseguridad. “El puerto es una frontera más y como tal debe ser tratada por la Delegación del Gobierno”, concluye. Advierte además que las detenciones que se están haciendo de nada sirven si no existe un plan de actuación rápido.

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Tendrian que expulsar a todos los que no se comportan como es debido y no tengan papeles, ademas ultimamente los inmigrantes, algunos protagonizan demasiadas salvajadas, peleas con sables, cuchillos , machetes etc, esto no puede seguir asi.