Cospedal desoye al Parlamento y al Supremo al prorrogar los contratos con la empresa Marsegur

Cospedal desoye al Parlamento y al Supremo al prorrogar los contratos con la empresa Marsegur

15 de enero de 2018 (aunque parezca que estamos en el siglo pasado)

LOS TRABAJADORES EXIGEN QUE SE HAGA “JUSTICIA”

El pasado 22 de diciembre, el Ministerio de Defensa prorrogó a esta empresa los contratos para los servicios de vigilancia y seguridad del Ejército del Aire.

El Ministerio de Defensa ha vuelto a prorrogar, hasta abril de 2018, los contratos para la seguridad de sus instalaciones a la empresa ‘low cost’ Marsegur, ahora denominada Novo Segur. Lo hizo el pasado 22 de diciembre renovando los servicios para el Ejército de Tierra y tres días después de que el Tribunal Supremo confirmara la sentencia de la Audiencia Nacional en la que declara nulo el convenio aplicado por esta empresa a sus trabajadores.

Dos meses antes, en septiembre, y a iniciativa de Unidos Podemos, el Congreso de los Diputados aprobó una proposición no de ley (con el voto en contra del PP) instando al Ministerio a rescindir los contratos con dicha empresa. El gabinete de Cospedal se comprometió a aplicar este mandato parlamentario, pero precisó que la rescisión del contrato tardaría meses porque no es un procedimiento inmediato.

El caso es que mientras el Ministerio cumple con su palabra, los trabajadores contratados por esta empresa siguen sufriendo la vulneración de derechos laborales. A día 12 de enero, cientos de vigilantes de seguridad no habían cobrado aún sus nóminas. Estos retrasos que se han venido prolongando casi un año se suman a prácticas tan esclavistas como pagar 10 céntimos de euro la hora festiva trabajada.

Marsegur sigue aplicando a sus vigilantes un contrato fuera de convenio que ha sido declarado nulo por el Supremo y que por ello mismo prohíbe a la empresa (según la propia Ley de Contratos del Estado) mantener las mismas condiciones laborales. De entrada, supuso un recorte salarial de entre 400/500 euros al mes, es decir, de 1087 euros de sueldo base, pasaron a percibir poco más de 700 por el mismo trabajo que venían realizando hasta la fecha. Esta situación ha provocado que muchos trabajadores, sometidos a la presión y problemas derivados de todo ello, hayan causado baja por diferentes cuadros médicos, la mayor parte por cuestiones psicológicas, según denuncian los trabajadores. La falta de personal ha provocado que en algunos centros militares no se puedan cubrir algunos de los turnos de vigilancia.

Por todo ello, los trabajadores califican de “fraude de ley” la actuación del Ministerio de Defensa “puesto que una empresa que por sentencia firme tiene un convenio, o se acoge a un convenio ilegal que aplica de forma unilateral a sus trabajadores, no puede ser contratada o prorrogada en dicho contrato por una administración pública”, recuerdan y se preguntan “¿qué hay tras todas estas adjudicaciones, contrataciones y prorrogas al margen de la ley?” en alusión al empresario Miguel Ángel Ramírez, presidente de Seguridad Integral Canaria, grupo del que se cree que Marsegur es una de sus marcas blancas y vinculado al PP tal y como ha salido reflejado en prensa.

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Noticia escribió:Los trabajadores se preguntan ....... “¿qué hay tras todas estas adjudicaciones, contrataciones y prorrogas al margen de la ley?”

Está más que claro. No sólo es la cuestión monetaria la que debemos tener en cuenta con este tema de las administraciones éstas al contratar a estas empresas pirata, incluso tras tenerlo prohibido por sentencias.

Están cargándose a nuestro sector. Entre todos, con la ayuda del señor Miguel éste de las narices.

Vamos, quien no lo vea a estas alturas... Yo desde luego lo veo clarísimo.

Se lo quieren cargar, lo quieren precarizar, quieren que se tenga la apreciación de que los vigilantes no somos profesionales (ya que como no cobramos bien en esas empresas, ni tan siquiera en las de convenio nacional, pues estamos bajos de moral y no nos centramos realmente en la seguridad supuestamente).
Quieren que se nos vea sin uniformes, sin defensas, sin grilletes (porque en esas empresas no los entregan), para así parecer aún menos profesionales y que la sociedad (que no sabe de la misa la media) tenga la apreciación de poca profesionalidad, y por ello también la sensación de que no hace falta ni siquiera estar habilitado para ser vigilante, y que entonces para este trabajo vale cualquiera.

Vamos, está clarísimo.
Incluso este año, para negociar el convenio nacional, la patronal Aproser nos puso delante la cuestión de las empresas pirata. Que esto no podía ser, que no podían subir mucho el convenio por este tema, ya que si no, no podían conseguir servicios, que si querían quitar la antigüedad, eliminar mejoras en las bajas laborales... y un largo etc.
Todo ello con el afán de precarizar más aún nuestro sector, aunque pudiera parecer que lo hacen para lo contrario. Sólo hay que leer el nuevo convenio aún sin publicar en el BOE.

Todo el mundo quiere precarizar el sector. Y se han buscado la ayuda del señor Miguel Pirata.

Esto es todo lo que hay DETRÁS de tanto rollo.
No hay que ser un lince para verlo.

Ya veréis como poco a poco este sector se va al carajo tal y como lo conocemos.

Y en su lugar se pondrá personal no habilitado, usease los intrusos actuales, como de hecho ya vemos cómo esto prolifera sin que nadie haga NADA aunque pueda parecer que se hace algo.

No se hace NADA realmente. ¿O alguien ve que si que se hace?

Ya veréis la de beneficios que con la destrucción de nuestro sector sacará todo el mundo en el futuro. Clientes, empresas, Estado...

Poniendo auxiliares que ni siquiera tienen convenios, va a ganar pasta TODO el mundo, menos los trabajadores, claro.

Esto es una opinión personal mía basada en hechos reales (como las películas). Y una profecía de las mías que dejo aquí para la posteridad.

Qué más quisiera yo que decir que nuestro sector está en auge, y me encantaría poder decirlo.
Pero decir esto sería engañarnos.
Y más cuando tenemos todas las pruebas delante de la jeta.

En vez de engañarnos a nosotros mismos, deberíamos tener en cuenta esta realidad, porque teniendo en cuenta la realidad que se nos viene encima podremos actuar. Si es que nos dejan, claro.
Pero si nos engañamos pensando y diciendo que esto está en auge, jamás ni siquiera intentaremos actuar ni hacer nada.