Faltan unos 30 funcionarios en la prisión Tenerife II,

02/12/15

En la prisión Tenerife II faltan unos 30 funcionarios, según APFP

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La carencia de personal sanitario obliga a repartir el viernes la medicación del fin de semana y que algunos internos sufran intoxicaciones y sobredosis al no dosificar los fármacos.

La Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones (APFP) asegura que en el centro penitenciario Tenerife II faltan actualmente unos 30 trabajadores en total, según la Relación de Puestos de Trabajo.

Dicho colectivo manifiesta que las carencias de recursos humanos existen en los departamentos de Seguridad o Vigilancia interna, en el ámbito administrativo y en el apartado sanitario.

Como en otros ámbitos de las administraciones, APFP señala que en las plantillas existen jubilaciones o algunos trabajos se benefician de comisiones de servicio, pero sus plazas no son repuestas por la Administración.

La Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones señala que, en el apartado de seguridad, la falta de trabajadores suficientes puede generar en el futuro problemas de agresiones por parte de internos, como ocurre en algunas prisiones de la Península. En cualquier caso, la APFP explica que Tenerife II no es una cárcel especialmente conflictiva. Y, de hecho, se asegura que hace meses que no se producen altercados de gravedad en los diferentes módulos.

En el departamento administrativo, la carencia de trabajadores supone una sobrecarga para los empleados que están en sus puestos diariamente.

Y, curiosamente, la carencia de personal sanitario suficiente obliga a que los viernes se distribuya a los presos la medicación de todo el fin de semana, es decir, del viernes, el sábado y el domingo.

Y con la mayoría de los internos no existe problema ante esa circunstancia. Sin embargo, algunos encarcelados se exceden en sus dosis diarias y ese fenómeno, unido al consumo de alguna sustancia psicotrópica, genera "intoxicaciones" o "sobredosis", según reconocen desde la APFP.

Y esa circunstancia ha podido ser considerada una de las hipótesis de más de una muerte de un interno en el centro penitenciario ubicado en el municipio de El Rosario.

Además, desde septiembre del 2014, la vigilancia exterior del centro penitenciario la realizan de forma conjunta agentes de la Guardia Civil y vigilantes de una empresa privada. Según uno de los representantes de la APFP consultados en la jornada de ayer, este es un ejemplo de la tendencia que existe a nivel nacional para privatizar dicho servicio de seguridad.



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